25/10/2025
Algunos consejos para la parte vendedora
Vender una casa es una montaña rusa.
Primero la alegría: “¡firmamos la semana que viene!”.
Y luego… el golpe de realidad:
Las llaves cambian de manos en días y tú aún estás con la mudanza a medias.
En Vivalta lo vemos a menudo.
Propietarios que nos llaman con la voz medio entre risa y pánico:
“He vendido el piso… pero el nuevo todavía no está listo.
¿Puedo quedarme unos días más?”
La buena noticia: sí, puedes. Solo hay que hacerlo bien.
Ese margen se llama tiempo de cortesía. Y es un acuerdo sencillo que te permite respirar entre la venta y la mudanza.
Ni ocupas, ni molestas, ni te metes en líos.
Lo importante es dejarlo todo por escrito:
cuánto tiempo te quedas, en qué condiciones y hasta cuándo entregas las llaves.
Así, tú ganas unos días para hacer las cajas con calma,
y el comprador duerme tranquilo sabiendo cuándo entra a su nueva casa.
En este artículo vas a aprender:
- Qué significa el tiempo de cortesía tras la venta de una vivienda.
- Las opciones legales para seguir en la casa después de firmar.
- Cómo pactarlo en la escritura para que no haya sorpresas.
- Quién paga los gastos mientras tanto.
- Qué hacer el día de la entrega de llaves.
- Consejos prácticos para vendedores y compradores que quieren hacerlo bien.
🏠 Qué significa el tiempo de cortesía tras la venta
El tiempo de cortesía es ese pequeño margen que el comprador concede al vendedor para seguir usando la vivienda tras la firma.No es un derecho automático ni un “ya nos entendemos entre nosotros”, debe quedar por escrito y con fecha de salida concreta.
Sirve para algo tan humano como hacer la mudanza con calma, terminar papeles o esperar la entrega del nuevo piso.Durante ese tiempo, el comprador ya es dueño legal del inmueble, pero te deja seguir dentro temporalmente.
📜 Lo habitual es que se recoja en la escritura de compraventa, con un número de días concreto (por ejemplo, 15 o 30) y con condiciones claras sobre gastos y entrega.
⚖️ Opciones legales para seguir en la vivienda
Hay dos formas de hacerlo de manera segura:El contrato de comodato (la más recomendable) y la situación de precario (la más arriesgada).
1️⃣ El contrato de comodato
Es un acuerdo gratuito en el que el comprador te deja usar la vivienda durante un tiempo determinado.Todo queda por escrito, con una fecha límite y condiciones concretas: quién paga los suministros, qué pasa si hay daños o cómo se entregan las llaves.
💡 Suele usarse cuando el vendedor necesita unas semanas para mudarse y ambas partes tienen buena relación.
Qué debe incluir:
- Duración exacta del plazo.
- Obligaciones sobre suministros.
- Estado en el que se entregará la vivienda.
- Penalización si no se cumple el plazo.
Si se redacta bien, da tranquilidad y respaldo legal a ambas partes.
2️⃣ La situación de precario
Es lo que ocurre cuando el vendedor se queda “unos días más” sin acuerdo escrito. Parece inofensivo, pero es una bomba de relojería: el comprador puede reclamar la vivienda judicialmente en cualquier momento.
Y eso implica abogados, tiempo y dinero.
En Vivalta lo decimos claro: si no se firma, no hay cortesía.
El mejor trato es el que queda por escrito.
✍️ Cómo pactar el tiempo de cortesía en la escritura de compraventa
Para que tenga validez, el tiempo de cortesía debe reflejarse por escrito en la escritura pública.
Ahí se detalla:
- El número exacto de días en los que el vendedor podrá permanecer en la casa.
- Quién paga los suministros y gastos comunes.
- El estado en el que debe entregarse la vivienda.
- Las penalizaciones si no se cumple el plazo.
📑 Si no se deja claro, cualquier incumplimiento puede convertirse en una reclamación judicial.
💬 Consejo Vivalta: incluye una cláusula de penalización por día de retraso (por ejemplo, 50 €/día). Evita discusiones y mantiene la seriedad del acuerdo.
💡 Gastos y responsabilidades durante el tiempo de cortesía
Este punto genera muchas dudas.
Mientras sigas en la casa, sigues siendo responsable de los suministros (agua, luz, gas) y del mantenimiento diario. Nada de dejar facturas colgando.
Si se produce algún daño en ese tiempo, debes entregarla en el mismo estado en que se firmó la venta. Y si no lo haces, el comprador puede reclamarlo con base en lo pactado.
🧾 También puedes acordar en el contrato que el comprador asuma ciertos gastos, pero solo si ambas partes lo aceptan expresamente.
🔑 Entrega de llaves y finalización del tiempo de cortesía
El gran momento.
Cuando termina el plazo, se hace la entrega formal de llaves y con ello el comprador toma plena posesión del inmueble.
Lo ideal es dejar constancia por escrito (una pequeña acta o correo con confirmación) y comprobar juntos el estado de la vivienda.
Si el vendedor no entrega la casa a tiempo, el comprador puede aplicar las penalizaciones acordadas o, en última instancia, acudir a la vía judicial.
💬 Consejo de Vivalta: si ves que no llegas al día pactado, habla antes con el comprador. La transparencia siempre da mejores resultados que la sorpresa.
Otros consejos prácticos
- Deja todo por escrito: fechas, condiciones y penalizaciones.
- Fija un plazo realista: ni 3 días imposibles ni 2 meses eternos.
- Evita los “ya lo hablaremos”, porque no valen nada si hay conflicto.
- Haz una entrega documentada de llaves y estado del piso.
- Y sobre todo: mantén la comunicación clara hasta el último día.
¿Quieres vender tu piso y necesitas unos días más para mudarte?En Vivalta te ayudamos a pactar el tiempo de cortesía con seguridad jurídica y sin perder la confianza del comprador. Porque una buena venta no termina en la notaría: termina cuando entregas las llaves con una sonrisa (y sin sobresaltos).
📞 Contacta con nosotros y te contamos cómo hacerlo fácil, legal y sin dramas.